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Un hombre pasó por una estación de servicio. Un trabajador limpió el parabrisas del vehículo, mientras cargaba el combustible.

«Gracias por utilizar nuestra estación de servicio. Que tenga un buen día » dijo el trabajador.

Sin embargo, el hombre dijo que el parabrisas aún se veía sucio y le pidió limpiarlo de nuevo. El trabajador lo limpió una vez más rápidamente.

«Quedó bien. Ahora puede arrancar.»

Sin embargo, el hombre dijo con tono de queja:

» Todavía está sucio. ¿Ni siquiera sabes limpiar el parabrisas?

Entonces el trabajador observó al hombre detenida mente, y luego entró en la tienda, salió con un paño suave y se lo entregó.

«Disculpe, señor, ¿pero podría limpiar sus gafas, por favor?»

El hombre limpió sus gafas con el paño que el trabajador le dio, y miró de nuevo el parabrisas limpio y brillante.

Nosotros no sabemos acerca de nuestro error solo mirando los errores de otros.

3 thoughts on “Manchas

  1. Si esto me pasara, me sentiría tan avergonzada de mí misma. Al leer esta historia, me preocupa haber cometido estos actos arrogantes y ridículos sin saberlo.

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